Random Forest es una técnica actual dentro del machine learning, que se caracteriza por ser muy precisa al trabajar con volúmenes de datos grandes, pero a la vez fácil de usar. Hoy en día, es una herramienta que se utiliza con frecuencia para construir modelos predictivos. Por eso, si quieres trabajar en este campo, es importante conocer cómo funciona y sus principales aplicaciones.
El Random Forest en machine learning es un método de aprendizaje supervisado que se basa en un conjunto de múltiples árboles de decisión. Pero en lugar de trabajar de manera independiente, colaboran unos con otros para que las predicciones que realizan sean más precisas. Se le conoce también como bosque aleatorio.
Los árboles de decisión analizan diferentes variables y dividen los datos en ramas para clasificar o predecir resultados. Sin embargo, cuando se trabaja con uno solo, este puede ser sensible a los cambios del conjunto de entrenamiento, por lo que habrá errores de generalización. Por el contrario, cuando se trabaja con el algoritmo del Random Forest, este problema se soluciona, ya que cada uno de los árboles que participan está entrenado con datos y características que son seleccionadas al azar.
Por tanto, a diferencia de los árboles de decisión individuales, el Random Forest combina los resultados de varios para reducir la varianza del modelo y aumentar su estabilidad. En otras palabras, un bosque aleatorio actúa como un comité que decide por mayoría para que las predicciones sean más equilibradas. No obstante, se puede utilizar en combinación con otras técnicas de análisis predictivo.

El algoritmo sigue cuatro fases, que son las siguientes:
El algoritmo selecciona aleatoriamente varias muestras del conjunto original de datos. De este modo, una misma observación aparecerá en más de una muestra. A este proceso se le conoce como bootstrap sampling, y tiene como objetivo que cada árbol entrene con datos variados para añadir diversidad a los modelos.
Durante el entrenamiento, cada árbol elige aleatoriamente un subconjunto de características en cada división para reducir la correlación entre árboles y conseguir que el modelo pueda generalizar. Así se evita que uno o varios predictores dominen la decisión final.
Cada muestra bootstrap genera un árbol de decisión independiente que se entrena sin podarse para que cada uno capte patrones específicos. Una vez construidos, todos los árboles forman un bosque aleatorio, que combina los resultados individuales para obtener una predicción conjunta que sea más fiable.
En los problemas de clasificación, cada árbol vota por una categoría y la clase final se determina por mayoría. En regresión, el resultado se obtiene con el cálculo de la media de las predicciones de todos los árboles. Es un mecanismo de agregación que reduce los errores y hace que las estimaciones sean más estables.
Las principales ventajas del Random Forest son:
Es un método que puede trabajar con datos incompletos o con ruido y aun así ofrecer resultados fiables. Al ser varios árboles, se reduce el peso de valores atípicos y los resultados sean más consistentes. Los modelos que se construyen con esta técnica son menos sensibles a los cambios en los datos de entrenamiento, por lo que son útiles en modelos analíticos en entornos empresariales muy dinámicos.
El sobreajuste es uno de los mayores problemas en el aprendizaje automático. Los árboles individuales suelen memorizar el conjunto de entrenamiento, pero un bosque aleatorio mitiga ese riesgo gracias a la aleatoriedad en el muestreo y en la selección de variables. Así se adapta a los patrones reales sin depender de valores específicos del conjunto de entrenamiento.
Otra de las ventajas es la clasificación y la regresión en el Random Forest. Significa que se pueden predecir las categorías, como el riesgo crediticio, o valores numéricos, como precios o demanda. Además, puede aplicarse a datos estructurados, texto o incluso imágenes.
Los algoritmos de bosque aleatorio se adaptan bien a conjuntos de datos masivos. Gracias a su estructura paralelizable, cada árbol puede entrenarse de manera independiente. Por eso, se usa también en análisis complejos en los que se necesita velocidad y capacidad para escalar.

Algunos ejemplos de Random Forest actuales son:
Marketing y comportamiento del cliente. Se segmentan las audiencias, se anticipan comportamientos y se diseñan estrategias de marketing predictivo.
Para aprender a trabajar con este método, hay que entender su base matemática y su aplicación práctica. Con nuestro Máster en Business Analytics e Inteligencia Artificial en Barcelona y Madrid, no solo trabajarás con el Random Forest, sino también con diversas metodologías de machine learning avanzadas, modelos analíticos y herramientas de análisis predictivo aplicadas a la toma de decisiones. Además, se analiza el impacto de la IA y se aprenden metodologías ágiles de gestión de proyectos.